
Lo confieso, soy un tanto soñadora y tontorrona, pero, aunque reconozco que en algunos momentos es un poco estresante, ¡me encantan estas fiestas!; mis recuerdos de estas fechas tanto de la niñez, como de la juventud y luego con niños pequeños, son muy especiales: de esos que te tocan el corazón. Hoy, ya con hijos adolescentes, sigue siendo una auténtica gozada adornar la casa con los motivos navideños, comprar los regalos (mucho más entregarlos), organizar menús y conseguir todos los ingredientes, reunir a la familia alrededor de la mesa donde saborear una exquisita cena y divertirnos. Es genial disfrutar de todos esos grandes momentos con los que quiero y aprecio: eso que tiene de mágico la Navidad ¿a que si?
Pero junto a esta parte “espiritual” y sensible que tienen las navidades, también hay otra fascinante, por el glamur, la seducción y la fiesta. Hablo de la gran noche, la más loca del año, la Nochevieja.
En marcha tu ingenio creativo
Si eres la anfitriona de tal evento, ten presente que el estilismo de la mesa, para esta cena tan especial, tiene que ser espectacular y así despediremos el año por todo lo alto. Pero ello requiere planificación y tiempo, así que pon a trabajar tu ingenio. En este post vamos a ver diferentes ideas en las que se mezclan por un lado la calidez y la tradición junto con un toque contemporáneo y elegante que se podrá adaptar a todos los hogares y con las que creo podrás salir airosa de tal privilegio y gozar también de este proceso creativo.
Combina los colores
En esta cena de despedida también abrazamos un tiempo nuevo y la euforia de estrenar año se debe reflejar en un escenario digno. Olvídate de los tonos hogareños como los rojos y verdes de la Navidad y lánzate con provocativos colores para dar a tu mesa un toque de elegancia y sofisticación, pero siempre guardando un orden estético. Así, serán protagonistas: el dorado, un clásico que confiere al ambiente calor y tiene connotaciones de puro glamur. Con el blanco va perfecto.

El plateado, más liviano, que capta la luz y proporciona un aire muy festivo.

El color bronce suele dar un toque de antigüedad y además aporta elegancia.

El blanco proporciona luminosidad como ningún otro color y armoniza perfectamente con dorados y plateados suavizando su fuerza.

Por último el negro, un color que trasmite poder y elegancia, cualidades que se verán potenciadas en combinación con dorados y plateados. Podemos utilizarlo para darle un toque selecto a nuestra mesa de fin de año.

Y claro, este frenesí de matices se mezclará con llamativos preparados donde los sabores serán igualmente protagonistas.

Textiles de gala
Y puesto que ésta es una noche en la que luciremos nuestras mejores galas, que incluso compramos especialmente para la ocasión, de la misma manera tu mesa también tiene que brillar esplendida con tu mejor mantelería. Un mantel liso o adamascado permitirá resaltar la vajilla y la cristalería. Si optas por los estampados que sean suaves, piensa que la mesa de fin de año se caracteriza por lo mucho que ya colocamos en ella, por lo que ten cuidado con lo que eliges para que no te quede muy recargada. Otra alternativa son los caminos de mesa o los mantelitos individuales. Estos darán un toque más moderno y sofisticado. Dependiendo de los comensales, puedes colocarlos de manera independiente para cada uno o en el centro sobre el que situar los adornos navideños.
Respecto a las servilletas sabrás que nos pueden ayudar mucho a decorar la mesa en función de cómo las coloquemos: enrolladas, en forma de triangulo, en un sujeta servilletas de plata, superponer varias de diferente color,…con ello vas a reforzar el ambiente festivo. Yo opto por las de tela y me encanta que el tono marque contraste con el mantel.

Utensilios que no pueden faltar
Y dado que la ocasión es apropiada debemos poner una buena vajilla. También puedes combinar platos diferentes, siempre de forma armónica claro y así obtener un precioso resultado que resultará impactante. La opción de utilizar bajoplato es muy funcional.

Por lo que se refiere a los cubiertos, y como manda el protocolo, no olvides que el cuchillo y la cuchara se colocan a la derecha y el tenedor a la izquierda y van por orden de utilización desde el exterior hacia el interior (Regla que no me acabo de aprender)

La cristalería es un elemento que pone brillo y elegancia en la mesa, incluso si colocas copas de diferentes juegos, simplemente hay que crear un ambiente y una armonía entre ellas para que todo se vea espectacular.

No escatimes el número de piezas, porque recoger y limpiar ya se hará el año que viene.
Una opción que puede resultar muy adecuada y cómoda es disponer una mesa auxiliar que sirva de apoyo para colocar las bebidas y que puedes además engalanar apropiadamente.

El toque final
Es importante que los adornos no se conviertan en un estorbo. Procura siempre que la altura no impida que los comensales se puedan ver. Por otro lado si utilizas velas o farolillos y éstos están encendidos no deben dar demasiada luz. Y en el caso de que dispongamos algún tipo de esencia, que no sean muy intenso para no alterar los sabores y olores de los alimentos. Ahora solo elige los elementos con los que crear el ambiente perfecto para esta noche tan especial.
Las velas son indispensables en estas fechas: bien sobre candelabros, formando parte de centros de mesa o simplemente dispuestas por el decorado. Los de la foto son macollas de hierro con acabado en pintura acrílica rebajada en agua.

Un clásico muy extendido son los centros de mesa. Pueden llevar toda clase de elementos como pueden ser bolas de navidad, velas, ramitas de acebo, lazos, piñas, adornos propios de mercadillos navideños… los ordenaremos meticulosamente sobre bandejas, platos, jarrones o directamente sobre la mesa. Hay miles que van desde los diseños más sencillos hasta los más complejos, e indudablemente no te costará nada crear uno acorde a tus gustos y la decoración de tu hogar.



Otra opción muy decorativa es llenar un jarrón con bolas de navidad de los colores que vayan con los de la mesa y que puedes colocar en el centro.

Una, dos, tres…. y doce
Son las grandes protagonistas de la noche, las uvas no pueden faltar y por supuesto necesitan de una presentación especial: envueltas en papel transparente con un lazo en el extremo o bien en un cuenco o copa de cristal resulta una propuesta muy refinada

El Tictac para decorar la mesa de fin de año
Pocas noches como ésta el reloj está tan presente. Llegado el momento todos estaremos atentos a su tic tac, emocionados por el paso de un año a otro. Podemos darle la relevancia que merece y colocarlo en la mesa, ¿no te parece?


Claro que la tradición manda mucho y el reloj de la Puerta del Sol de Madrid, que ha marcado durante muchos años las campanadas a tantos de nosotros, estará presente un año más y lo seguirá incontables, eso seguro.

Un brindis por los nuevos retos
Bueno pues ahora brindemos por el nuevo año, ¿si? y que éste venga lleno de alegrías. Si no eres de champagne (como yo) existen otras opciones como la sidra, así que ¡no tienes excusa!
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